miércoles, 20 de noviembre de 2019

Amaneció la acuarela

Eran los años setenta cuando en las noches de Madrid sonaban por los mesones canciones de la tuna compostelana.Había una de ellas que se cantaba con frecuencia se empezaba por la noche y aparecía el día siguiente igual que en la acuarela que reproduce la ocasión.La tonada empezaba algo así como " Las calles están desiertas y parece que llovió son lágrimas de una niña por el amor que perdió"